Norelys Morales Aguilera- Una revisión somera sobre las opiniones de personas que vieron el programa de televisión del Canal 41 de Miami donde se “reveló la identidad de un miembro de la Red Avispa” a la que pertenecían cinco antiterroristas cubanos, coinciden en que fue una pachanga, una burda patraña.
Hasta el autor de un blog que está convencido que los Cinco Antiterroristas Cubanos son culpables, afirma que Ed Levy López “debió exagerar su comportamiento emocional para dar a entender su anticastrismo ante todo.”
Según Levy, "La Habana había instruido a su red de espías de que tratara de penetrar la plana mayor del Comando Sur, al tiempo que en otra ocasión recibieron un mensaje extenso en el que se le solicitaba a uno de los agentes que analizara el movimiento de las autoridades de la Guardia Costera y de la DEA en la costa, con el fin de ver si era posible ingresar armas, personas y explosivos al país. "
¡Ingresar armas en el país del mundo donde es más fácil adquirirlas suena bastante a ingenuidad y tontería si no se está diciendo con fines aviesos!
El entrevistado, después de 12 años de encierro de los cubanos en cárceles de Estados Unidos, se aparece ahora diciendo que sus supuestos compañeros tenían instrucciones de vigilar el Comando Sur que por aquella época se trasladó de Panamá al Condado de Miami.
¡El Comando Sur, nada más y nada menos cuando todo lo que hace el Comando Sur es notoriamente público o esperable, hasta para un aprendiz de espía!
Nadie podría suponer que este señor compareciera a la prensa sin ser autorizado por sus mentores, en un arranque de protagonismo anticastrista para el sur de la Florida, cuando les sobran payasos y cirqueros de todos los talantes, junto con terroristas, desde luego.
No es casual la necesidad de presentar al sujeto en Miami, donde blanquear a un terrorista es posible y lograr que dos presidentes (Bush padre e hijo) admitan en Estados Unidos a asesinos confesos como Orlando Bosch Ávila y Luis Posada Carriles.
Tampoco existen reglas éticas para hacer prevalecer prácticas violentas o extremistas toleradas y financiadas por agencias federales estadounidenses por medio de cubanos radicados allí, con el supuesto de que La Habana cambie su política.
Lejos de disminuir las amenazas de terrorismo contra Cuba se mantienen e incrementan a despecho de las denuncias. Las nuevas pruebas aportadas por el terrorista Chávez Abarca, detenido en Venezuela y extraditado a la Isla, implican a sujetos y grupos violentes de Miami y la CIA con atentados y crímenes en Cuba. Ni lo han desmentido ni lo pueden desmentir.
La solidaridad internacional y la comprensión de lo absurdo y abusivo al encierro de Gerardo, Ramón, Antonio, René y Fernando, los reales antiterroristas, han puesto en el tapete que es el Presidente Obama quien podría limpiar el dudoso honor del sistema judicial norteamericano.
Amnistía Internacional el 4 de octubre en una carta dirigida al fiscal general de Estados Unidos, Eric Holder, con la que se adjuntaba el informe -The Case of the ‘Cuban Five’-, afirmó que, al mismo tiempo que no adoptaba una postura sobre la culpabilidad o inocencia de estos cinco hombres respecto de los cargos que se les imputaban, consideraba que existían dudas sobre la justicia e imparcialidad del juicio, que no se han resuelto en la apelación.
La misiva recuerda que en mayo de 2005, el Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria de la Organización de Naciones Unidas reconoció que el gobierno estadounidense no garantizó a los cinco cubanos un juicio con las debidas garantías, como prevé el artículo 14 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.
Sería absurdo pedir a la cochambre de Miami que sean serios, pero en buenas técnicas de propaganda fascista, algo queda y eso es lo que intentaron con la presentación de Levy López, quien no compareció a la Televisión por puro deporte.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario