El también supuesto pacifista, amigo carnal de los terroristas Luis Posada Carriles y Ángel De Fana, Fariñas fue invitado por la diputada del PAN Mariana Gómez del Campo, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores para América Latina y el Caribe, junto con otros personajillos miembros de UNPACU como Juan Antonio Madrazo, Elena Larriñaga de Luis y Andrés Hernández. Los panistas involucrados en esta maniobra eran 4 senadores y Jorge Ocejo, integrante del Comité Ejecutivo Nacional del PAN.
En un abierto llamado para que México viole su tradicional postura de respetar la no injerencia en los asuntos internos de otros estados, Fariñas pidió al Senado mexicano que llame al gobierno cubano a sentarse con una supuesta oposición creada y sustentada por Estados Unidos, sin representatividad alguna en la población cubana debido a sus divisiones y mercenarismo.
La senadora Gómez del Campo formuló un llamado al presidente Enrique Pela, con vistas a que México funja como mediador en las negociaciones que llevan a cabo los gobierno de Raúl Castro y Barack Obama, escribió Percy Alvarado en su blog.
Alguien tiene que recordarle a Guillermo Fariñas, como ha señalado otro bloguero cubano, que cuando los españoles querían la paz con los cubanos no negociaron con los traidores, llamados rayadillos por los insurgentes. Fariñas es un rayadillo moderno. ¡Va a pensar que Estados Unidos los va a tomar en consideración después de haber negociado en secreto con las autoridades cubanas!.
Cuba no necesita la mediación de los rayadillos, señor Fariñas. Tampoco de los llamados plattistas, que apoyan el bloqueo, el terrorismo y no saben palabra alguna de lo que es dignidad nacional, así como alguien que se opone a las negociaciones aunque matice hoy sus palabras hipócritamente, diciendo que "“es un buen paso que Cuba y Estados Unidos se hayan sentado a conversar, pero le pedimos al Senado mexicano que nos ayude a exigirle al gobierno cubano que se siente con su propia oposición, tanto dentro como fuera, para limar esperezas”, según La Jornada de México.
Pero, menos aún, Cuba no va a negociar con los amigos terroristas miamenses de Guillermo Fariñas. Bastante sangre y sufrimientos han causado en su país, aunque un mitómano no lo reconozca detrás las monedas de sus pagadores.
Mejor que los panistas, en lugar de dar espacio a estos payasos dentro del Senado mexicano, dediquen su tiempo a buscar fórmulas para detener la podredumbre política, los crímenes del narcotráfico, la corrupción generalizada y la violación de los derechos humanos en ese sufrido y desangrado país.
Ah, Fariñas no se ha enterado que en México hay desaparecidos miles de ciudadanos, probablemente ya muertos están 43 estudiantes, algo impensable y que nunca sucederá en su país, del cual se desgañita diciendo que es "una dictadura y un régimen totalitario".
Mejor que no diga una palabra más de Fariñas, resulta un sujeto indignante.
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