Claudio Della Crocce.- Más allá de los denunciados y probados
apoyos logísticos financieros de Estados Unidos y la derecha
internacional a los movimientos golpistas en Venezuela, lo que va
quedando claro es que el guión de la estrategia y de las intentonas está
escrito y firmado por la banca trasnacional, en busca de apoderarse de
las enormes riquezas del país.
Un
Informe para inversores del segundo mayor holding bancario de Estados
Unidos, Bank of America- Merrill Lynch (1), muy probablemente escrito
por su economista-jefe regional, el venezolano Francisco Rodríguez y
publicado una semana después de la intentona del 12 de febrero último,
deja todo en claro.
El reporte centra su análisis en la posible evolución del marco
político de Venezuela a partir de los últimos eventos. Plantea
hipótesis de al menos tres escenarios alternativos, tomando en
especial consideración que las movilizaciones y el arresto de Leopoldo
López podrían servir, o bien para “energizar a la oposición tomando
ventaja del creciente descontento por el marco de un aumento de las
dificultades económicas, o , en forma contrapuesta, como ha ocurrido
en oportunidades anteriores , para que el gobierno logre unificar sus
fuerzas en contra la denunciada conspiración golpista para destituirlo.
No llama la atención: desde el 2000 Rodríguez se ha convertido en un
francotirador contra Venezuela desde Estados Unidos (manipulando y
falseando cifras y realidades, como denunciara el Center for Economic
and Policy Research in Washington) (1) y ahora está actuando el papel de
asesor financiero, tratando de atrapar al actual o al futuro gobierno
venezolano en un negocio de endeudamiento.
Tampoco llama la atención la participación activa del Bank of America
en la generación de imaginarios colectivos para la desestabilización:
ya lo hizo en 1973 en Chile. En cuanto Salvador Allende ganó las
elecciones, se creó el Comité Ad Hoc de Chile, con sede en Washington y
formado por las principales empresas mineras estadounidenses con
propiedades en Chile, así como por la International Telephone and
Telegraph Company (ITT), que poseía el 70 % de la compañía telefónica,
que pronto iba a nacionalizarse,Purina, Bank of America y Pfizer
Chemical.
El guión del Bank of America
Al primer episodio, el reporte lo denomina con el significativo
título de ” Primavera Venezolana” y señala que la detención de López
sirve como catalizador para la continuidad y profundización de las
protestas contra el gobierno, con la expectativa es que éstas sean
retroalimentadas por el desborde inflacionario y la creciente escasez,
con “llamados a la renuncia del presidente Maduro volviéndose
crecientemente prevalentes”.
Especula que ante la pérdida de popularidad del Presidente, un sector
militar podría comenzar a presionar para que abandone el poder,
llevando a su reemplazo por un gobierno de transición ante un llamado a
elecciones que probablemente ganaría la oposición.
En forma muy suspicaz, plantea que la oposición podría haber aprendido del fracaso
del 2002 cuando llamaron a una huelga general contra el entonces
presidente Hugo Chávez, y ello permitió al gobierno culpar a la
oposición de los problemas económicos del país y caracterizar el paro
como insensible a los desafíos de los venezolanos. Asimismo, el
análisis reconoce que la oposición tiene una influencia mínima o
ninguna en PDVSA, no estando en capacidad de parar su producción de
petróleo, que está ubicada en lugares aislados de la población.
Plantea Bank of America- Merrill Lynch que no habría problemas para
la continuidad del pago de la deuda – preocupación central de este tipo
de boletín para inversores-, aunque dejan abierta la posibilidad que
Maduro, en su desesperación, anunciara la suspensión de pago de deudas,
lo que consideran poco probable por los enormes costos posteriores de
la medida. Dejan abiertas posibles alternativas de elegir “enemigos
más cercanos”, a través de medidas tales “como ampliar
nacionalizaciones o un conflicto armado con Colombia”.
En este escenario de destitución se hace hincapié que el gobierno de
transición y un eventual gobierno de oposición posterior serían
“amigables para el mercado” (sus propios negocios). Ponen de relieve
que López es un graduado de la Escuela Kennedy de Harvard y un firme
sostenedor del libre mercado, habiendo propuesto la venta de 9% del
paquete de PDVSA en la bolsa de Caracas en su campaña en las elecciones
primarias de la oposición en 2012.
Apuestan a suponer por último que el gobierno entrante luego de un
colapso de Maduro, tendría las mejores condiciones para “dar forma a
un plan económico” (seguramente un eufemismo para referir un ajuste
regresivo económico contra la población y las conquistas económicas y
sociales del chavismo).
En el segundo escenario, “Despertar Rudo”, el informe de Bank of
America- Merrill Lynch indica que el gobierno llegaría a “caracterizar
correctamente las acciones de la oposición como un intento de golpe”,
poniendo el eje en el señalamiento que la oposición desea alcanzar por
la fuerza lo que no pudo hacer por los votos. Estos argumentos podrían
unir y movilizar la base de apoyo social del gobierno, así como a los
sectores militares en su entorno, contra “una asonada golpista”.
En tal perspectiva, indica el informe, la opinión popular podría al
final a fortalecer el apoyo gubernamental. Si se vuelve notorio que
el gobierno no puede ser volteado, ello podría llevar a la
desmoralización a muchos que apoyan a la oposición y las movilizaciones
irse desarticulando y crecerían las disputas dentro de la oposición
entre los duros que quieren apoyar la permanente movilización y los
moderados que desean intentar ganar las elecciones de 2015. El informe
entiende que podría de tal forma producirse la repetición de
escenarios similares a los de 2002, 2004 y 2007.
En tal marco el informe bancario no cree que se abriría una crisis
para los acreedores, ya que el default hasta podría ser interpretado
como una admisión por parte del gobierno que la oposición habría tenido
éxito en desestabilizar el país, justamente lo que no se querría
evidenciar.
En el tercer escenario indica que la fuerza de las demostraciones de
la oposición llevan a la percepción que el gobierno ya no puede
controlar la caída al caos económico, y aun aliados clave actuales
pierden confianza en la capacidad de Maduro de mantener una apariencia
de gobernabilidad. “Comandantes militares de alto rango” acuerdan
tomar el control de la situación, expulsando al Presidente, suspendiendo
las garantías constitucionales, y reprimiendo violentamente las
demostraciones de la oposición. El nuevo gobierno “decreta estado de
emergencia y suspende las elecciones de 2015″.
Indica el informe que un golpe al estilo de los años 1970 tendría
mucha dificultad para obtener apoyo internacional, en tanto significaría
la supresión del marco constitucional. Una alternativa podría ser que
los militares tomaran el control del gobierno pero aceptaran mantener a
Maduro formalmente como jefe de gobierno. Aun así, la represión podría
despertar una enorme condena internacional.
En esta hipótesis, Venezuela se “convertiría de la segunda
no-democracia del continente ” (por supuesto, están refiriendo sin
nombrar a Cuba) con el riesgo de quedar en soledad. Suponen que la
mayor parte de los gobiernos latinoamericanos, incluyendo aquellos que
vinieron siendo amistosos con el chavismo, tendrían prevenciones para
aceptar que una rebelión militar contra un gobierno electo puede ser
exitosa. Existirían presiones para aplicar sanciones contra el país,
sobre todo ante la percepción que el nuevo gobierno no respetaría los
derechos humanos.
Bank of America- Merrill Lynch entiende que este escenario sería de
alarma para los inversores-bonistas. El creciente aislamiento de
Venezuela reduciría la probabilidad de lograr fuentes de
financiamiento con un costo razonable., en tanto las sanciones podrían
llevar disminuir el incentivo para el gobierno de pagar.
Probablemente este escenario llevaría a la eliminación del gobierno
de “radicales de izquierda que están detrás de la estrategia económica
actual del gobierno” y que los “pragmáticos” tomaran la conducción
económica, “permitiendo algunos mejoramientos del marco de la política
económica”
¿Dónde están los dólares?
La estrategia mediática de los economistas de la oposición, a través
de la gran prensa comercial, es que se acabaron los dólares. Pero según
las mismas cifras del BCV, refrendadas por un informe Bloomberg (2)
Venezuela tiene importantes fondos en dólares, pero colocados en el
exterior(2) . El condicionamiento financiero de la banca trasnacional
intenta lograr que se revierta lo que Venezuela ha avanzado desde 2005,
en especial las nacionalizaciones y las estatizaciones .
El economista venezolano Simón Zúñiga (4) señala, al respecto que,
“representando una influencia de la socialdemocracia internacional, en
un intento de domesticar, occidentalizar, y civilizar lo rebelde del
proceso chavista-bolivariano, termina coincidiendo estratégicamente con
el paradigma oposicionista” neoliberal.
La ralentización, y casi paralización, de la aprobación de divisas en
diciembre marcó un inicio de año con amenaza de un desabastecimiento
agudo no sólo en alimentos sino en salud. Los críticos señalan como
errores del gobierno, pretender desaparecer a CADIVI, encargada hasta
entonces del control cambiario, de un plumazo y sin una estrategia
comunicacional. [y sin instalar el organismo sustituto, el Centro
Nacional de Comercio Exterior hasta ahora es una realidad sólo en la
Gaceta Oficial]
Pero tras las medidas financieras tomadas a principios de año por el
gobierno de Maduro, los economistas se plantean las limitaciones
institucionales y la creciente incertidumbre, las dudas sobre si el
Centro Nacional de Comercio Exterior (Cencoex), sin garantías de estar
exenta de corrupción e ineficiencia, está en condiciones de manejar la
complejidad de un proceso de asignación de divisas, que va más allá del
relacionado con las importaciones y las exportaciones. De lo contrario,
las posibilidades de un colapso en las compras externas se reflejaran en
la economía, señala Zúñiga.
Las medidas implican un fuerte ajuste macroeconómico, que incluye un
shock institucional, y esto tendrá un efecto importante sobre la
fijación de los precios y sobre la actividad económica, en momentos en
que el desabastecimiento se estaban generalizando y alcanzando niveles
críticos.
Rafael Ramírez, vicepresidente económico, anunció la necesidad de
poner orden en la utilización de la renta petrolera, lo que debiera
traducirse en un Plan de divisas y un Presupuesto de divisas, en un país
cuyos ingresos en divisas y su posición de activos financieros
externos, no justifica esta situación (absurda) de restricción,
combinada por el derroche y el desorden en el uso de los dólares de la
renta petrolera.
Zúñiga señala, además, que se deben atacar los poderes fácticos,
excluir a la banca privada en su rol como “operadores cambiarios”, ya
que han sido cómplices e muchas de las fechorías que se le adjudica al
gobierno, además de tener las manos metidas en el mercado paralelo y la
fuga de divisas. Esta orientación fue tomada en cuenta en los últimos
anuncios que hizo el Gobierno, al señalar que las solicitudes para la
subasta de divisas (SICAD) sólo se tramitarían por la banca pública.
Siendo correcta la orientación de sacar del juego a la banca privada,
sin embargo la implementación de la medida corre el riesgo de fracasar
por su improvisación. Antes de debió avaluar la capacidad de la banca
pública para convertirse en el único “operador” cambiario del SICAD.
Rafael Ramírez, Vicepresidente del Área Económica, tiene un reto
inmenso en sus manos, porque el debilitamiento de la credibilidad y
fortaleza patrimonial del BCV y de las Reservas Internacionales, no sólo
es un factor que ha venido favoreciendo la estrategia conspirativa de
los que fijan el dólar paralelo, sino que está comprometiendo seriamente
la viabilidad económica y financiera del proceso político.
Pdvsa debe decidir entre enviarle los dólares al BCV (al Estado) para
enfrentar las necesidades de liquidez (evitando el colapso económico y
político) o vender los dólares a una tasa mayor (en el SICAD-1 y ahora
en el SICAD-2) para resolver el enorme desequilibrio creado en el flujo
de caja de PDVSA. Decisión difícil, al filo de la navaja.
Notas:
1) http://www.cepr.net/documents/publications/venezuela_2008_04.pdf
2) publicado en GEM Fixed Income Strategy & Economics, 19 de Febrero de 2014.
3) El informe “Venezuela Ogles Chavez’s Hidden Billions as
Reserves Sink” (“Venezuela codicia los millardos ocultos de Chávez
mientras las reservas se agota) fue difundido por Bloomberg a sus
sucriptores el 09-12-2013.
4) Los datos sobre los dólares que tiene el sector público
colocado en el exterior son públicos y están
en:http://www.bcv.org.ve/excel/2_4_2.xls?id=330
5) Ver artículo
enhttp://www.aporrea.org/actualidad/a180332.html, en el cual señala:
“Ante la insuficiencia de liquidez, tanto en bolívares como en dólares,
el Gobierno se encuentra frente al “eterno retorno” de ajustar o
financiar. Lo primero, ajustar lo puede hacer a través de devaluar,
aumentar el IVA, aumentar la gasolina, recortar el gasto público y
recortar el consumo privado. La primera opción suele imponerse ante lo
polémico de las demás (IVA y gasolina) y lo recesivo de las últimas
(recorte del gasto y del consumo de las familias).”
*Economista argentino, miembro de la Asociación Argentina de Economía Radical
Rebelion/Qestion Digital
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