El banco reconoció que perdió en una inversión riesgosa en productos derivados. El director ejecutivo de JPMorgan, Jamie Dimon, se enfrentó a los accionistas enfadados en la asamblea anual del banco realizada en Tampa.
Curiosamente en el estado de la Florida tiene asiento un gran negocio, el de la contrarrevolución latinoamericana, que nunca han investigado. No se informa si tiene que ver con esos grupos económicamente poderosos, corruptos y mafiosos, muy activos en la política norteamericana.
Jamie Dimon afirmó: “Esto nunca debió haber sucedido. No puedo justificarlo. Lamentablemente, estos errores son auto provocados. (Eso se llama corrupción aunque endulcen la frase y continuó:
“Ahora nos estamos dedicando a realizar una revisión exhaustiva de los problemas que provocaron estas pérdidas. Hay muchas lecciones que aprender y muchos cambios de política y de procedimientos que ya han sido aplicados. Además tomaremos todas las medidas correctivas necesarias”. Nótese el lenguaje de frases vacías que impera en Estados Unidos.
La pérdida renovó los pedidos de una reglamentación más severa de Wall Street. Los críticos afirman que JPMorgan podría haber evitado la pérdida si hubiera reglamentaciones en vigor, a las que el banco se opuso. Peter Skillern, de Reinvestment Partners, habló en nombre de un grupo de accionistas y dijo que Dimon tiene demasiado poder en la junta directiva de JPMorgan.
Peter Skillern declaró: “Jamie Dimon es el director ejecutivo y presidente a la vez, lo que equivale a ser su propio jefe y el problema que enfrentamos en este momento tiene que ver con la responsabilidad de la pérdida de 2.000 millones de dólares en productos derivados. La unidad no fue debidamente supervisada. Entonces, ¿quién supervisa esa unidad? Jamie Dimon. ¿Quién supervisa a Jamie? Jamie. Ese es el problema, es su propio jefe. La junta directiva debería responsabilizar al director ejecutivo”.
Mientras tanto, un grupo de manifestantes se congregaron frente a la asamblea para denunciar la avaricia de las empresas. A estos se les puede reprimir sin contemplaciones porque los negociantes tienen su sistema para contenerlos.
Denise Díaz sostuvo: “Hay que disolver a los grandes bancos y reducir las obligaciones de los propietarios que están con el agua al cuello con sus hipotecas y para que mantengan su dinero fuera de la política, que realmente está destruyendo nuestra democracia en este momento”.
El presidente, Barack Obama, ha considerado que el caso de JPMorgan Chase, demuestra que la reforma de Wall Street es necesaria. Obama tiene hasta $1 millón en una cuenta a la vista del banco JPMorgan Chase, informó la Casa Blanca este martes, en medio de la polémica que generó el anuncio de pérdidas de corretaje por $2 mil millones en esa entidad financiera, según AFP.
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