Por eso, y para identificar el cáncer, ya sea hereditario o familiar, está en marcha en Cuba el servicio de oncogenética con vistas a lograr la detección precoz de esa enfermedad y la prevención de tumores malignos, una de las principales causas de morbilidad y mortalidad en el mundo.
Del total de modalidades de lesiones oncológicas, entre un cinco o un 10 son consideradas hereditarias, dijo en declaraciones a Prensa Latina la jefa del servicio de oncogenética en el capitalino Instituto Nacional de Oncología y Radiología (INOR), Marta Sonia Robaina.
Al decir de la especialista, cuando a un paciente se le dice que tiene cáncer, su proyecto de vida y sus planes cambian, y si le tenemos que informar también que esta enfermedad puede verse en otros miembros de su familia, porque puede tener hijos afectados, el efecto es muy dramático.
Por eso, tuvimos temor de comenzar con nuestra consulta, pero -para orgullo nuestro- la aceptación ha sido muy grande, aplaudió.
En la actualidad tenemos más de 500 familias beneficiadas en la mayor isla de las Antillas con el servicio.
Teniendo en cuenta que el cáncer es una enfermedad multifactorial en la cual están implicados tanto los factores genéticos como los ambientales, no solo hacemos el diagnostico y estimamos el riesgo, sino que también actuamos sobre los estilos de vida, expresó.
La también especialista en genética clínica, dijo que las principales modalidades que atienden se cuentan, el cáncer de mama hereditario, colorrectal hereditario, retinoblastoma y cáncer familiar de próstata.
Al decir de la experta, no es lo mismo hereditario que familiar. El familiar puede ser porque comparten los mismos estilos de vida, por ejemplo, cuando estamos expuestos al humo cuando se fuma, y ese indicador puede determinar la incidencia en determinadas familias.
Por su parte, el hereditario es cuando están presentes las células germinales que transmiten a la descendencia y pueden haber afectados en las distintas generaciones, explicó la también académica con 30 años de experiencia.
Aunque este servicio se ofrece en la actualidad en el Hospital Oncológico de La Habana, centro de referencia nacional de este proyecto, tenemos una red de genética médica, con genetistas en todas las provincias, resaltó.
Ante una interrogante sobre cómo llegar al servicio de oncogenética en Cuba, respondió que las vías de remisión pueden ser por los médicos de la familia, genetistas de las provincias, por oncólogos, gastroenterólogos o cada una de las especialidades.
Tenemos registrado a todos los cubanos y cubanas que asisten a nuestras consultas con su árbol genealógico listo para cuando tengamos la tecnología poderlo caracterizar molecularmente y así perfeccionar la atención, aseguró.
Hay aproximadamente 200 síndromes de cáncer hereditario, y de ello se conoce gran número de genes involucrado en la patogénesis de la enfermedad, pero hay otros que tenemos que seguir esperando por el desarrollo de la biología molecular, comentó.
UN SUEÑO CONVERTIDO EN REALIDAD
Cuando creamos el Programa Nacional de Genética, nadie pensó que podía tener la magnitud de la actualidad, dijo la también académica de Universidad de Ciencias Médicas de La Habana.
De igual manera, sucedió con el servicio de oncogenética, el cual demostramos con resultados la necesidad de seguir invirtiendo recursos en este sentido, porque lo más importante es la salud de los pacientes, reflexionó.
Lo que fue un sueño, para algunos, hoy es una realidad, de la cual pienso que tenemos lo más importante: el recurso humano y la voluntad política, subrayó.
Como han dicho otros compañeros, yo tengo la suerte de ser fundadora del programa de genética cuando parecía una quimera, y no había genetistas, solamente cinco, apuntó la doctora Marta Sonia Robaina.
En nuestro servicio, cuando apreciamos que el cáncer es hereditario y no hay manera de hacer prevención, le brindamos asesoramiento a las personas, así como seguimiento de por vida, garantizándole buena atención.
PROBABILIDAD DE GENERALIZAR LA EXPERIENCIA EN CUBA
La especialista cubana manifestó su gran deseo de que este servicio de asesoramiento genético sobre el cáncer se ofrezca en el resto de los territorios de esta nación caribeña.
'Tenemos listo todo para cuando se decida extender este servicio a todas las provincias, donde están los genetistas clínicos que le falta entrenamiento'.
Yo tuve que estudiar mucho para hacerme oncogenetista, pero en el mundo es a la inversa, los oncólogos hacen su entrenamiento o preparación en asesoramiento genético, expresó.
Por ejemplo, existen instituciones, como en España, las llamadas Unidades de Cáncer Hereditario, así como también hay Consejo Genético en casi todas las provincias, y es lo que pretendemos hacer aquí, explicó.
En realidad, tenemos las condiciones, lo único que falta es programar una consulta de asesoramiento genético en cada lugar con los mismos recursos que tenemos.
Sin embargo, por sus características, los laboratorios de biología molecular están centralizados, y en ese sentido trabajamos por ampliar nuestras relaciones con el Hospital Hermanos Ameijeiras y los centros del polo científico.
Según la Organización Mundial de la salud (OMS), el cáncer comienza con la transformación de una sola célula, que puede tener su origen en agentes externos y en factores genéticos heredados.
Aproximadamente un 30 por ciento de las muertes se deben a cinco factores de riesgo comportamentales y alimentarios (índice de masa corporal elevado, consumo insuficiente de frutas y verduras, falta de actividad física y consumo de tabaco y alcohol) y, por lo tanto, pueden prevenirse, señala la agencia de salud de la ONU.
* Periodista de la redacción de Ciencia y Técnica de Prensa Latina.
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