Nicanor León Cotayo.─ Varios medios de prensa resaltaron, este miércoles, burlas provocadas por el discurso de Donald Trump ante la Asamblea General de la ONU en Nueva York.
Según el artículo del periodista Ason Szenes los presentes en el plenario no pudieron frenar la risa, al escuchar el discurso del presidente donde ensalzó sus aparentes hazañas económicas.
El articulista de EFE agregó que Trump llegó a decir que "En menos de dos años, hemos conseguido más que casi ningún otro Gobierno en la historia de nuestro país".
Las risas de algunos diplomáticos fueron escuchadas por la televisión y el mandatario pareció desconcertado y trató de defenderse expresando, "es verdad, no me esperaba esa reacción”.
Las delegaciones presentes luego de las risotadas ante la grotesca retórica del orador, hicieron silencio y evadieron aplaudirlo.
Szenes precisó cuando en el discurso el mandatario advirtió que “Alemania se volverá completamente dependiente de la energía rusa si no cambia el rumbo de inmediato", cámaras de la televisión tomaron sonrisas y gestos de sorna entre los miembros de la delegación alemana.
De manera burda, en declaraciones ante periodistas acreditados, Donald Trump trató de restar importancia a lo dicho y afirmó que su frase le pareció “genial y estaba pensada para provocar risas”.
Ante la necesidad de ganar mayor respeto, el año pasado el presidente lo había solicitado al anunciar la salida de Estados Unidos del Acuerdo de París sobre el cambio climático.
Y reiteró: "No queremos que los líderes de otros países se rían más de nosotros. Y no lo harán".
Recientemente, en un acto en la Casa Blanca también advirtió: "El mundo se está riendo de la estupidez de lo que hemos hecho con la inmigración".
Ben Rhodes, ex asesor de Barack Obama quien trabajó en varios de sus discursos ante la ONU, aprovechó el momento y expresó:
"Antes, los presidentes estadounidenses marcaban la agenda global en la Asamblea General de la ONU. Ahora, se ríen de Trump".
Thomas Wright, experto en estrategia internacional del centro de estudios Brookings, opinó que las risas "tuvieron que dolerle a Trump, y desde la década de los 80 ha estado obsesionado con la idea de que la gente se está riendo de los presidentes de Estados Unidos. Nunca ha sido verdad”.
Recientemente, el analista Wright declaró a The Washington Post, "creo que lo va a volver absolutamente loco. Lo dicho se le clavará como una daga en todas sus inseguridades”.
Incertidumbres que, por cierto, ya van conformando una montaña en los predios de Washington.
Lo sucedido en la ONU explica aún más, la incertidumbre del Partido Republicano con el posible saldo de los próximos comicios parciales, donde, entre otras cosas, será renovado el actual Congreso de Estados Unidos.
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