Agentes del Buró Federal de Investigaciones (FBI) irrumpieron anoche en un consultorio en Florida del oftalmólogo Salomón Melgen -el principal contribuyente y amigo íntimo del congresista cubanoamericano- y confiscaron numerosos artículos de su oficina personal.
El FBI rehusó explicar el motivo exacto de la redada, pero medios de prensa la asocian con una indagación iniciada por esa agencia contra Menéndez y el doctor por sus frecuentes visitas a República Dominicana y las presuntas relaciones sexuales con menores de 18 años de edad, según PL.
De hecho, la operación federal tuvo lugar pocos días después de publicarse en Internet mensajes electrónicos que revelaron la existencia de la pesquisa, abierta desde el pasado 1 de agosto y dirigida por el detective Rabino Chávez tras recibir testimonios sobre los viajes no autorizados del legislador y Melgen al país caribeño.
Un remitente identificado como Peter Williams alertó al agente del FBI de que Menéndez contrató y tuvo sexo con cuatro adolescentes, lo cual es considerado un crimen penal en Estados Unidos.
Dichas actividades eran fetichistas, se realizaban en grupo y tuvieron lugar en 2012 en una residencia del lujoso centro turístico Casa de Campo -en la costa sureste dominicana- y propiedad del oftalmólogo.
Williams también precisó en sus correos que esos viajes de placer eran realizados en un jet privado de Melgen.
Las malas noticias no cesan para Menéndez. Ahora la cadena Fox News informó sobre una orden del Departamento de Seguridad Nacional para atrasar el arresto de uno de sus becarios hasta después de los comicios del pasado 6 de noviembre, cuando el congresista salió reelecto en su escaño senatorial.
Según ese medio, funcionarios de inmigración tenían previsto detener el 25 de octubre al peruano Luis Abraham Sánchez por violación sexual e indocumentado, pero las autoridades de Washington determinaron llevarlo a prisión el 6 de diciembre para así evitar llamar la atención antes y durante las votaciones.
El mismo Menéndez, aliado a grupos extrema derecha, admitió que al joven lo contrataron en su oficina como asesor en temas migratorios con una visa vencida y antecedentes penales por agresión sexual.
Sánchez permanece en la cárcel a la espera de la deportación.
Todas estas revelaciones parecen los ingredientes perfectos para darle dolor de cabeza por un buen tiempo al congresista, quien también cuenta en su historial con la fama de permitir la expansión de la prostitución, el juego y la extorsión mafiosa mientras fue alcalde de Union City, localidad cercana a Nueva York.
Además, ponen en entredicho su reputación justo cuando acaba de asumir el cargo de presidente del Comité de Asuntos Exteriores del Senado estadounidense.
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