Si bien se realizó una nueva promesa de asistencia por 30 mil millones de dólares durante un periodo de dos años que culminaría este año, el informe del lunes emitido por el Instituto Internacional de Medio Ambiente y Desarrollo, con sede en Londres, concluye que se entregaron menos de 24 mil millones, la mayor parte en préstamos que deberán ser reintegrados.
Las negociaciones sobre el clima tienen lugar poco después de que un informe de Naciones Unidas concluyera que la concentración de gases de efecto invernadero se incrementó un 20% desde el año 2000. Durante una conferencia de prensa que tuvo lugar el lunes, el enviado de la Unión Europea Artur Runge-Metzger afirmó que Europa está dispuesta a aumentar sus esfuerzos para reducir las emisiones si otros países siguen el mismo camino.
Artur Runge-Metzger declaró: “Estamos listos para aumentar nuestras ambiciones del 20 al 30 % si otras grandes economías también van hacia el máximo de sus promesas. Esta oferta está todavía sobre la mesa y se mantendrá sobre la mesa aún después de Doha. Sin embargo, lograr un compromiso internacional del 30% exige negociaciones con nuestros socios de todo el mundo, en especial con las grandes economías. Estados Unidos ya ha dejado claro que no puede avanzar, por lo que no creemos que haya discusión productiva alguna en Doha respecto al aumento de los objetivos de cada país individualmente”.
Estados Unidos se resiste a atender llamado a profundizar reducción de emisiones en Cumbre Climática de la ONU
El pasado lunes, Estados Unidos se resistió a los llamados a profundizar la reducción de emisiones y afirmó que el gobierno de Obama se ajustará a la promesa efectuada en 2009 de reducir las emisiones en un 17% sobre los niveles de 2005 para el año 2020. Las declaraciones fueron efectuadas a pesar de la petición presentada por países de escasos recursos solicitando mayor acción para contribuir a que el mundo evite nuevas graves tormentas, sequías, inundaciones y aumento en el nivel de los mares. Un analista de Action Aid Estados Unidos indicó que el cambio climático tiene un impacto más duro sobre los países pobres.
Brandon Wu expresó: “Lo que sucede cuando hay una sequía en Estados Unidos y los precios suben, lo que sucede cuando un huracán azota Nueva York, como saben, es algo serio, es un problema, pero ¿qué pasa cuando los mismos desastres azotan países que no cuentan ni cerca con los mismos recursos? ¿Qué sucede por ejemplo cuando un huracán azota a Haití? ¿Qué sucede cuando hay sequía en el Sahel? El impacto es mucho más grave y hay una dimensión real de justicia climática en esta discusión que tiene que ocupar un papel mucho más relevante en Estados Unidos”.
Fuente: Democracy Now!
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