Además, el líder ecuatoriano afirmó en una rueda de prensa que el país “no tiene que pedir permiso a nadie para otorgar un asilo como lo solicitó Assange, que “Ecuador ha asumido una decisión soberana” y espera que “el Reino Unido otorgue el salvo conducto”.
La semana pasada el mandatario ecuatoriano concedió el asilo diplomático a Assange, provocando de esta manera la ira de del Reino Unido, que advirtió que no dejará marcharse a Assange "cueste lo que cueste", amenazando con tomar la embajada ecuatoriana.
En respuesta, Rafael Correa declaró que tal actitud sería un "suicidio diplomático" para el país. "Si Reino Unido viola la soberanía ecuatoriana sería un suicidio porque después se podrían violentar las embajadas británicas en cualquier parte del planeta", afirmó el líder ecuatoriano.
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