Luis Yánez pide clemencia para huelguista que hospitalizado aumenta de peso.

Norelys Morales Aguilera.

Luis Yáñez-Barnuevo García, coordinador de la Asamblea Parlamentaria Eurolatinoamericana (EUROLAT), en el plenario del Grupo de la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas ha reclamado a las Embajadas de Cuba en las capitales europeas para solicitarles "clemencia para Fariñas, un esfuerzo más decidido para evitar su muerte y algún gesto que se encamine a la liberación de los presos enfermos o su traslado a hospitales donde puedan ser tratados", según Europa Press.

Solicitando “clemencia para Fariñas” el “sociolisto” español resulta esperpéntico: grotesco y desatinado.

Nunca requirió clemencia un hombre que no cumple sanción penal ni está siendo obligado a tratamiento lesivo alguno. El deportista de los ayunos ha iniciado su última etapa de abstención alimentaria en absoluta libertad con el pretexto de liberación para otros detenidos juzgados y sancionados por delitos y no por opiniones.

El gobierno cubano, sin obedecer a los mercenarios de Estados Unidos y de la mafia anticubana de Miami, hace tiempo que ha concedido licencias extra penales a personas juzgadas y sancionadas o más recientemente, luego del diálogo con la Iglesia católica, acercó a sus domicilios a otros. Gesto tal no se le conoce a la "democracia" española que mejor debiera representar Yáñez-Barnuevo García o la norteamericana, que dispersó a cinco cubanos antiterroristas, lejos de sus familiares, por varios estados de la Unión.

Martha Beatriz Roque, una de las beneficiadas por salir de prisión sin concluir condena, debiera contar cómo continúa saludable para sus actividades constantes como empleada de la SINA, recibiendo dinero, del cual también viven unos cuantos sin trabajar en Cuba dedicados a cumplir con la necesidad yanqui de una “disidencia poderosa” en la Isla.

Si la Real Academia de la Lengua Española en su definición de clemencia no se ha equivocado, la misma significa “compasión, moderación al aplicar justicia”, algo absolutamente absurdo para Fariñas, que ya ha cumplido sus sanciones por delitos comunes. Total, que para emplear bien su idioma Yáñez-Barnuevo García debió decir " auto clemencia" de Fariñas. Habría sido más atinado.

Fariñas arriesga la vida. Pero, la alharaca y las carticas de algunos, que se llaman amigos y hasta amiguitas de última hora como Yoani Sánchez, pidiéndole que abandone el ayuno voluntario, siempre va acompañado de la exaltación a su conducta y un lavarse las manos por si fallece alguien que no dejaría legado ético alguno.

En la realidad su papel como político mercenario no pasa de una farsa como se sabe bien en Cuba. Si se desea una prueba del poco valor que se le concede en su propio país, baste el llamado que hizo a los cubanos a no votar en las elecciones donde participaron sus coterráneos mayoritariamente. Él mismo luego votó para payasear con que escribió consignas en la boleta.

El jefe de los Servicios de Terapia Intensiva del Hospital Arnaldo Milián Castro, de Santa Clara, el doctor Armando Caballero López, indicó que el huelguista está consciente pero su estado se complicó en la última semana debido a una infección y trombo que podría desprenderse.

“Llegó a nuestra sala con 63 kilos de peso y en la actualidad está oscilando entre los 67 y 69 kilos. Ha aumentado su peso corporal durante su ingreso y ha sido precisamente por la alimentación parenteral que está recibiendo”, dijo Caballero.

Alicia Hernández, madre de Fariñas y enfermera de profesión, declaró a Efe que "es cierto" todo lo informado por el diario Granma respecto a su estado de salud.

No hay comentarios.:

AddToAny