Fidel Castro, el líder de la Revolución Cubana realizó su quinta aparición pública en una entrevista televisada que tuvo con los embajadores cubanos con quienes conversó sobre la situación de Irán y Corea del Norte y reiteró la amenaza de una guerra en el Medio Oriente. El ex mandatario también entregó cartas personales a cada uno de los diplomáticos. La víspera, visitó el Acuario Nacional en La Habana donde presenció un espectáculo de delfines.
Fidel analizó la situación de Irán y consideró que ésta era ''una copia al carbón de lo que le hicieron a Mohamed Mossadegh".
Mossadegh fue un primer ministro iraní derrocado en la década de los 50 por un Golpe de Estado impulsado por Estados Unidos ante la política de nacionalización de los recursos naturales que llevaba a cabo el país islámico.
En relación con la negación del Gobierno estadounidense sobre el presunto secuestro del científico nuclear iraní Shahram Amirí, el ex presidente cubano afirmó que EE.UU. no daba una versión creíble de la situación.
''Cuantas mentiras, que falta de ética, que grosería, que cosas inventan'', enfatizó Fidel Castro sobre la versión de EE.UU. de los hechos.
El ex mandatario también dialogó sobre la sustentabilidad en el tiempo de Estados Unidos (EE.UU.) y una posible desaparición del mercado mundial, así como también la promoción que Washington hace de las armas convencionales que pueden tener el mismo poder destructivo que las nucleares con los últimos avances tecnológicos.
''Los yanquis quieren ofrecer un mundo sin armas nucleares pero por qué las sustituyen por armas convencionales'', indicó el líder cubano.
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