Norelys Morales Aguilera.
Unas tímidas declaraciones de Miguel Bosé sin implicación con Cuba ni su sistema político provocaron la furia de la falangista anticubana Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad de Madrid. De paso, deja observar la mentirocracia del estado Español, que no de los españoles.Esta falsa demócrata no le podía perdonar a Bosé que no coreara lo que ella desea. Tan fina como sus Rey mandando callar a Chávez.
El estallido de ira de la Aguirre es una clarinada para los derechistas. O sea, la mentira corporativa indica: esto es lo que hay que repetir:
"Uno de mis primeros actos políticos fue una manifestación, que éramos cuatro gatos, con los 25 años de la dictadura de Fidel. Pues ya lleva 51 y ahí sigue la izquierda española, protegiéndole y entendiendo que lo mismo da quitar unas fotografías de una exposición que torturar a todos aquellos disidente y dejar morir a un pobre albañil [por Orlando Zapata]al que le han privado de agua durante 15 días", ha dicho Aguirre.
Como es evidente la Aguirre miente también respecto a Zapata Tamayo. Su desplante la coloca en el sitio ideológico y de actividad política que le corresponde, junto a falangistas y terroristas. ¿Qué, si no, indica la entrega de 70 mil euros que le hiciera al prófugo de la justicia cubana por terrorismo, Carlos Alberto Montaner?
La Asociación Iberoamericana por la Libertad, un invento de Montaner vinculado a su partido Unión Liberal Cubana “cuya membresía cabe en un sofá”, ha recibido en el 2009 unos 70 000 euros (cerca de 100 000 dólares) que se añaden a los 79 000 euros del año anterior, para organizar “foros de debate” sobre Cuba a pesar de que su página web no se actualizó desde 2005.
No llega una a explicarse cómo la "democracia" española no se escandaliza.
El regalo a Montaner, un personaje que se exhibió en los últimos meses como el partidario extranjero más frenético de la dictadura hondureña de Roberto Micheletti, tiene como propósito predicar en Cuba “valores como la libertad, la igualdad, la justicia, el pluralismo y la democracia” al más rancio estilo americano.
Montaner en esos días venía de Panamá tras participar en un “seminario” organizado por corresponsales de los servicios de inteligencia norteamericanos con la participación del agente Jaime Suchlicki, jefe del ICCAS de Miami subsidiado por la USAID, de James Cason, el ex jefe de la Sección de Intereses Norteamericanos en La Habana y de unos cuantos otros personeros más de la fauna mafiosa de Miami.
Con posterioridad se entregó de lleno a la campaña para hacer pagar caro al “castrismo” la osadía de no ser colonia yanqui, meta a la cual ha dedicado su vida, pero eso sí, bien pagado. Mucho dinero hay en juego contra Cuba. Quien no lo quiera ver, se le puede dejar a elección.
Junto con individuos como este, el fin es que España con la UE participe en "un diálogo estructurado con la sociedad civil cubana y aquellos sectores que apoyen una transición pacífica". Lo cual es ni más ni menos que lo mismo que dicen los Estados Unidos recientemente por voz de Hillary Clinton en el Senado de ese país: "Apoyamos plenamente el trabajo que a nuestro juicio debe ser hecho en apoyo de esa gente dentro de Cuba". O sea, de sus mercenarios.
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