Pero como siempre he tenido un pensamiento tan resistente a ser dictaminado, no me preocupan los calificativos y digo lo que siento, a riesgo de "aguar la fiesta" les comparto:
Estoy feliz de que alguien perverso como lo es Trump no esté cuatro años más con el dedo en el gatillo que dispararía una catástrofe mundial y, además, asfixiando a más no poder a mi país. Claro, Trump no es solo un desquiciado, aunque lo es, es también expresión de a dónde puede llegar el sistema en su tendencia a despreciar lo humano en función del lucro, lo degradante y burdo que puede ser.
No más Trump y estoy aliviada. Pero, también me consterna que en nuestro mundo el resultado de las elecciones de un solo país tenga en vila al resto del orbe, todos siguiendo voto a voto, como si en eso nos fuera la vida. Eso lo constato y no me alegra. Yo le pregunto a los censores, este orden mundial injusto y desigual que nos tiene a las mayorías sujetados al destino de unos cuantos magnates ¿lo va a cambiar el resultado de estas elecciones? No me pongo eúforica: tengo conciencia sí de las contradicciones que vivimos y de todo lo que peligra en la época por la que atravesamos. Y lo siento mucho si aguo la fiesta.
Ojalá, y este es un buen deseo, venga un periodo de distensión en las relaciones con Estados Unidos y exista apertura al diálogo dentro de ciertos márgenes de entendimiento. Pero yo le pregunto a los censores, ¿dejará atrás el nuevo gobierno el delirio de sentirse con la misión de liderar el mundo, llamar de dictadura a quienes decidan no adscribirse a sus fallidos cánones de democracia y sentir que deben intervenir para cambiar regímenes políticos que no se avengan a sus intereses económicos, dejarán de sentir que les corresponde llevar la democracia a Cuba, por ejemplo? No sé trata de estar eufóricos, seguramente habrá por parte de los míos, conciencia crítica y pensamiento claro para captar la cualidad del momento, convicciones tanto como disposición al diálogo, y claro, una ética para las relaciones diplomáticas y una altura moral que, como siempre, sean ejemplos.
Así, sin dejar de alegrarme por la salida del fascista, mi euforia, ese divino clímax, lo guardo para el día en que los pueblos del mundo, incluyendo el mío, no tengan que estar sometidos a la violencia de un sistema que se basa en la explotación de los más en beneficio de los menos; el día que el FMI y el BM dejen de ser mecanismos de extorsión en beneficio de unos cuantos tipos de unos cuantos imperios; el día que se respete cabalmente la decisión de cada pueblo de decidir su destino y ningún otro se inmiscuya injerencistamente en sus asuntos internos; el día que cientos de millones no estén hundidos injustamente en la más vil miseria; el día que cientos de millones de niños que ahora no lo hacen puedan estudiar en lugar de realizar trabajo prácticamente esclavo; el día que las negras y los negros no sigan siendo baleados impunemente en el norte, o carcomidos por el Sida y otras enfermedades en una tierra de donde se siguen extrayendo todo tipo de riquezas para los menos; el día que Estados Unidos con la ayuda de la OTAN y Occidente no siga fabricando guerras que fulminen la vida de cientos de miles de inocentes solo porque a los menos les agranda el bolsillo; el día que se invierta más en medicina, escuelas y comida que en armas de destrucción masivas; el día que los pueblos no sean desplazados por las transnacionales; el día que los niños palestinos no sigan siendo masacrados por el abusador Israel; el día que el ritmo acelerado de producción y consumo en un planeta donde muchos mueren de hambre no amenace la vida en la tierra; el día que quiten sin condiciones el bloqueo de mi país, y podamos avanzar sin bases navales enemigas que nos usurpan territorio, ni estrangulamiento económico de ningún tipo, a seguir construyendo la sociedad que queramos. El día que el capitalismo, ese sistema salvaje, ese genocida más respetado, deje de seguir jodiendo a "los pobres de la tierra", los más, el "99 %". Yo pregunto a mis censores, ¿el nuevo gobierno del país que autoproclama que tiene la misión de liderar el mundo, contribuirá a ello?
Yo entiendo, cada quien es feliz por lo que le interesa y eso lo respeto. Mientras, que me disculpen mis censores por la herejía que estoy cometiendo.
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