Debiera esperarse que este grupo de países supuestamente defensores de los derechos humanos y la democracia, al menos realizara algún pronunciamiento sobre el desbarajuste electoral en Honduras, y de la OEA y Almagro, algo más contundente que desconcierto, ante lo que todo indica que se trata de enmascarar un fraude.
Ese supuesto desconcierto cómplice es escandaloso, dejando una buena tarea a los medios corportivos y redes sociales, cuya misión es silenciar el fraude, la militarización de unas "¡elecciones democráticas!", el estado de excepción y, especialmente satanizar a quienes protestan por preservar sus votos acusando a la Alianza opositora de responsabilidad por la inexplicable demora en los resultados.
Lo más grave ha sido denunciado por Salvador Nasralla, de la Alianza de Oposición contra la Dictadura, insistiendo en que las protestas de sus seguidores son pacíficas y estas han sido infiltradas por elementos a ajenos para empañar legítimas demandas.
Al respecto llamó a la policía a no infiltrar las manifestaciones, fuertemente reprimidas por las fuerzas antimotines, y acusó a Orlando Hernández de dar la orden a ese cuerpo uniformado a fin de deslegitimar las denuncias.
Por otra parte, Nasralla publicó en su página de Facebook un video en el cual asegura que la suspensión de garantías será utilizada para sustentar el fraude electoral.
En un principio el candidato opositor llegó a tener una ventaja de cinco puntos sobre Orlando Hernández el candidato presidente, pero en la medida que pasaron los días y se daban a cuentagotas los resultados esa distancia se acortó hasta que la situación se revirtió de manera sospechosa, según Prensa Latina.
Acorde con Nasralla no se trata de un robo sencillo, sino de uno muy sofisticado con bastantes elementos para arrebatarle la victoria en los comicios.
Este viernes, 269 intelectuales de los Estudios Centroamericanos, Latinoamericanos y Latinos-Chicanos de Honduras, firmaron un comunicado exigiéndole al Tribunal Supremo Electoral (TSE) de ese país, un informe que transparente "todas las actividades relacionadas con la elección" ocurrida el pasado domingo 26 de noviembre de este año.
A casi una semana de celebrados los comicios, con una recientemente declarada suspensión de garantías y toque de queda, aún no se dan a conocer el 100 por ciento de los escrutinios.
"Nos preocupa que las acciones del TSE, particularmente desde que las urnas se cerraron y se registraron los votos, han sido secretas, carentes de transparencia y responsabilidad, y han mantenido al pueblo hondureño en la oscuridad", informó teleSur.
Y, ¿Estados Unidos, Almagro y sus amigos? ... Bien, gracias, sin darse por enterados de la magnitud de las protestas y la de represión.
Tres muertos en cargas contra la oposición de Honduras ante sospechas de fraude. Cinco días después de las elecciones AUN no se conoce el resultado— AlOtroLadodelMuro 🇷🇺Bot Ruso🇷🇺 (@_ju1_) 1 de diciembre de 2017
pic.twitter.com/G4EfVYo20i
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