Más de mil pacientes fueron atendidos por la brigada médica cubana llegada a Piura, Perú, ciudad del norte del país para asistir a los damnificados de las inundaciones que devastaron este territorio, informó este 5 de abril el jefe del grupo, Rolando Piloto.
Al iniciar una nueva jornada solidaria, Piloto dijo a Prensa Latina que el contingente de 23 médicos y otros profesionales de la salud trabajan a ritmo intenso atendiendo en cinco refugios a los que fueron trasladados miles de refugiados cuyas viviendas fueron destruidas o dejadas en condiciones inhabitables por las aguas.
Precisó que las consultas de la víspera totalizaron 529, lo que, sumado a las del lunes arroja un total de mil 46 en dos jornadas de labores de campo realizadas.
También, dijo, se realizaron 549 labores educativas entre los refugiados y 23 audiencias sanitarias grupales.
Los epidemiólogos de la brigada realizaron levantamientos o evaluaciones sobre la posibilidad de brotes de enfermedades por las condiciones de la distribución de alimentos, los residuales líquidos y sólidos y los ambientes físicos.
Destacó la gran acogida que tiene la labor de los médicos cubanos y las buenas relaciones de trabajo con el personal de salud pública de Perú, con los que trabajan en forma coordinada.
Refirió que un grupo de estudiantes de medicina se presentó ante la brigada pidiendo trabajar como voluntarios con la brigada cubana como promotores de salud o asistentes, lo que es evaluado con las autoridades peruanas de salud.
La presencia de la brigada continúa una tradición de solidaridad de Cuba con Perú que se remonta a 1970, cuando un letal terremoto devastó parte del norte y una brigada médica fue la primera en llegar a socorrer a los damnificados y que tuvo otro hito similar tras el sismo que asoló la sureña región de Ica, en 2007.
La nueva jornada de labor de los cubanos coincidió con un nuevo reporte del Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN), según el cual las lluvias, avalanchas e inundaciones causaron 106 muertos y dejaron 155 mil damnificados y 955 mil 552 afectados.
El saldo de daños incluye más de 18 mil viviendas destruidas, 16 mil inhabitables y 210 mil con diversos daños. Se perdieron además dos mil 500 kilómetros de carreteras y 280 puentes, así como la producción de 28 mil hectáreas de cultivo.