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| Presidenta Dilma. Foto: Ismael Francisco |
"La integración regional latinoamericana y caribeña es un proyecto estratégico", aseveró Rousseff en su discurso de la sesión plenaria de presidentes de la II Cumbre de la Celac en La Habana, una reunión que calificó de "histórica".
La mandataria brasileña consideró que el organismo regional, al que pertenecen todos los países de América menos EE.UU y Canadá, "vuelve al Caribe más latinoamericano y a América Latina más caribeña", constituyéndose además en una "herramienta valiosa" de interacción con el resto del mundo.
En ese sentido, expresó que en los últimos meses la Celac, como bloque, ha estrechado relaciones con "actores internacionales diversos" como la Unión Europea, China y Rusia, según informe de Efe.
Al mismo tiempo, insistió en la necesidad de que la región, con 600 millones de personas, tome conciencia de "la urgencia" de su integración "en un mundo de mucha fragmentación" para conseguir "sinergias" que fortalezcan sus proyectos.
"Más que nunca, Brasil se siente parte de América Latina y del Caribe. Compartimos una identidad y trayectoria histórica común y la convicción de que esa experiencia será determinante para que juntos y sin pretensiones hegemónicas enfrentemos nuestros retos futuros", subrayó Rousseff.
La presidenta sudamericana celebró, por otra parte, el éxito de Cuba al frente de la presidencia de la Celac en el último año y puntualizó que el trabajo del país caribeño en ese periodo demostró "más de una vez" lo "anacrónica" de su "exclusión" en los foros regionales.
"Tenemos la convicción de que no habrá verdadera integración económica en América Latina y el Caribe sin Cuba", sostuvo.
A Costa Rica, país que asumirá mañana el liderazgo temporal de la Celac, Rousseff le deseó el mismo éxito alcanzado por la isla.
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