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Cuba Vive se escuchó en el Parlamento Europeo

Quiéranlo o no, la verdad no puede ser silenciada. Una avalancha de medios corporativos, de derecha y mal independientes, financiados por Estados Unidos se tiende en los buscadores como resultado de un tercer intento de del Parlamento Europeo de ser los voceros de Estados Unidos en la vieja Europa.

 Retroceder en los acuerdos con Cuba de la zona europea, mostrar la ficción de realidad sobre la Isla, que derivan de la guerra política y comunicacional que azota a la Isla es el objetivo de la maniobra.

Cuba ha realizado la correspondiente denuncia. Una minoría de eurodiputados dignos han alzado su voz y la Isla continúa defendiendo sus derechos y su democracia. 

Hipócritas los que no condenan el bloqueo de Estados Unidos y amenazan y tratan de chantajear a una pueblo. Una vez más se quedarán con las ganas.

La denuncia cubana 

La representación diplomática de Cuba en Bélgica y ante la Unión Europea (UE) ha denunciado la orquestación de una nueva maniobra contra la isla en el Parlamento Europeo con los derechos humanos como punta de lanza.

En una declaración, advirtió que el debate convocado para el jueves sobre “la situación en Cuba” se enmarca en el espacio que algunos eurodiputados abren en la Eurocámara a un pequeño grupo de ciudadanos cubanos que hacen el juego al objetivo de Estados Unidos de imponer un cambio de régimen al país caribeño, mediante la subversión y la desestabilización.

Hemos visto que en tres de las últimas seis sesiones plenarias se ha debatido sobre Cuba, el único país latinoamericano y caribeño analizado tanto en ese período, lo cual demuestra la singularización, la manipulación y el doble rasero de quienes utilizan el tema de los derechos humanos con un trasfondo marcadamente político, subrayó.

Para la misión diplomática, está claro el propósito de la nueva maniobra, que no es otro que entorpecer las relaciones entre la mayor de las Antillas y la UE y socavar la implementación del Acuerdo de Diálogo Político y de Cooperación entre las partes.

Al respecto, insistió en que solo el diálogo en igualdad de condiciones, bajo los principios del respeto mutuo, la no injerencia y la cooperación, constituyen las bases apropiadas para fomentar los lazos.

La Embajada de Cuba en Bélgica atribuyó a la cruzada el resultado de un mayor descrédito para la llamada casa de la democracia europea.

Si los eurodiputados promotores de este debate estuvieran realmente interesados en los derechos humanos de nuestro pueblo, denunciarían en primer lugar la flagrante y sistemática violación que representa la implementación del bloqueo estadounidense, manifestó en el texto.

De igual manera, repudió que las últimas resoluciones aprobadas sobre la isla en el Parlamento Europeo no contasen con la decencia mínima de mencionar el impacto del criminal bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Washington desde hace más de seis décadas, un cerco recrudecido de manera genocida en plena pandemia de la Covid-19.

En ese sentido, recordó que el alcance extraterritorial de la política estadounidense afecta los intereses de empresas y ciudadanos de países de la UE, a los que la Eurocámara se supone representen.

La declaración destacó que la agresividad enfrentada por la nación antillana no pudo impedir la gestión efectiva de la Covid-19 ni la vacunación contra esa enfermedad del 90 por ciento de sus habitantes con inmunógenos propios.

Asimismo, ratificó la postura del gobierno cubano de no ceder ante amenazas y chantajes y la voluntad del pueblo de decidir soberanamente su destino.

Diputados e integrantes de fuerzas políticas en el Parlamento Europeo reconocieron el 10 de diciembre, Día Internacional de los Derechos Humanos, la ejecutoria de Cuba en esta materia y denunciaron la flagrante violación de los derechos humanos representada por el bloqueo estadounidense.

Los miembros del Grupo de la Izquierda GUE/NGL en la Eurocámara el español Manu Pineda y el belga Marc Botenga resaltaron logros de la isla en sectores como la salud, en particular la lucha contra la pandemia, y su solidaridad con otros países.

El pueblo y el gobierno cubanos con su Revolución son los mejores defensores de los derechos humanos, porque los colocan en el centro de su accionar, afirmó entonces Pineda.

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